Cuando olimos por primera vez CK2 sobre la marcha la primavera pasada, pensamos que podría ser una de las fragancias más interesantes para perfumar las calles de París, Nueva York, Londres, Tokio, Beijing o Seúl. Una de las razones por las que retomamos los nombres de megalopoles como las cuentas de un gran rosario mundial es que CK2 ofrece un ambiente muy urbano, multiconfesional y culturalmente neutral ...
El perfume huele a limpio, evocando la limpieza del concreto, mineral, pero también vegetal, haciéndote pensar en los jardines colgantes de Babylons del siglo XXI. Los árboles y los mini bosques integran el hábitat humano vertical que ayudará a las ciudades tentaculares a tener pulmones verdes sanos y sus habitantes contemplarán el cielo azul con la boca desnuda. En cierto modo, CK2 es una oda a la vida limpia, que relegará las máscaras quirúrgicas a las salas de hospital en lugar de ser testigo de que sigan derramándose ocasionalmente en las calles.
Usted puede ser testigo de un movimiento hacia una mayor abstracción en perfumería que se manifiesta en esta fragancia compuesta por el perfumista Pascal Gaurin de IFF. Si desea evitar los perfumes francamente comestibles y la narrativa maestra de los golosos, CK2 es el aroma para usted. No está completamente libre del gran esquema de cosas perfumadas identificables como felicidad-está-en-tu-nevera-y-tu-botella-de-perfume - de ahí una nota base dulce de tonka transparente y / o sándalo - pero lo hace mantenga su distancia de la idea de notas de gourmets como comida chatarra dentro de una cultura atrayente cuyo leitmotiv parece ser comer hasta que el último chip o bola de helado se haya hecho a RIP
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